Qué hacía yo en un sitio como ese


Hace un rato me hacía esa pregunta. Sí, qué hacía yo viniendo en un autobús desde Linares para meterme entre pecho y espalda una carrera de 10 km. en Jaén, donde ni hubo ni habrá más cuestas de las necesarias.

Echemos la vista atrás unos días para buscarle explicación. Pasó en cualquiera de los 200 partidos que desde verano hemos cogido por costumbre jugar a la semana. Javi comentó que iba a entrenar un poco y a dejar de fumar para correr la San Antón. Cojonudo pensé (a ver si era verdad y deja de fumar jajaj) hasta que me hizo el cortés ofrecimiento de por qué no la corría yo también. “Je, je, je” pensé poniendo su típica cara de «eso no ha tenido gracia». Intenté escaquearme como pude diciendo algo así como que «ya si eso, si me daba tiempo» un día entrenaría con él para ver si era viable.

Cuando llegué a casa le di otra vuelta y me empezó a parecer un plan wai, quizá porque nunca antes nadie me había planteado algo así o quizá porque los planes con este pollo siempre salen dpm. Nachh me dijo que también la iba a correr y empezó igualmente a animarme. Le di otra vuelta pero esta vez activando el modo realista: si en mi vida no he corrido más allá del rato que dura una pachanga de fútbol, si correr me parece la cosa más aburrida del mundo, si he estado 3 meses en el gimnasio y me he subido a la cinta una vez, el primer día y porque el monitor nos miraba… Realmente visto así esto empezaba a pintar peor que cuando me hice pasar por loco y me tomaron por tal jajajajajaj.

Pasaron los días y Jav me iba contando sus progresos: «ayer baje a entrenar a la Salobreja, duré 20 min dando vueltas y me subí» jajajajaj, parece que vamos acercando posiciones. «Venga, que sí, que hoy cambio entrenar por jugar un partido» (ahí estamos). «El otro día salimos a hacer la carrera Nacho, mi hermano y yo, y a mitad de camino me volví» jajajajajajjajajaja. Bueno, pues si estamos en ese plan esto empieza  a coger forma de que sí que correré.

Era martes, pensé que aún había tiempo de entrenar un poco. Llamé a la Salobreja a ver donde se inscribía uno para la guerra: «disculpe señor, ayer se cerró el plazo». Acto seguido la señorita añadió: «si quiere puede correr sin dorsal». Vamossssssss!

Y de repente nos plantamos en el sábado, a las 9 de la noche para jugar otro partido (somos los más enganchaos de la zona, lo sé, pero yo por un fútbol hubiera cambiado hasta el cotillón). La semana había pasado, igual que yo sin entrenar. Ya no podía comprobar por mi mismo si era viable o no correr así que necesitaba nuevamente el apoyo moral y los consejos de este par de dos. Javi confirmó que podía correr porque el objetivo estaría en llegar con la ambulancia que cierra el recorrido (fuera pero pegados a ella). Volví a preguntar a Nach si me veía capaz, y este afirmó con su mejor sonrisa. Pues ya está, si yo tampoco necesito mucho… con ese último empujón bastaba. Mañana es domingo, me acosté pronto pensando que aunque fuera un sólo día entrenaría sí o sí, pero fue que no, porque además de que me fui a Linares se tiró todo el día lloviendo. Alea iacta est.

Y llegó el día de hoy: lunes día 16 de enero de 2012. Mi abuela, buena donde las haya y sin saber la que me espera, tenía preparado para comer un cocido de esos que no se salta un galgo, con sus buenos garbanzos, su tocino y su morcilla… la dieta que cualquier deportista siempre soñó. Intento dormir algo de siesta para reposarlo, qué risa: estoy más nervioso que si el Sr. Rajoy me fuera a nombrar ministro esa misma tarde. Me levanto y preparo una peazo lista en iTunes para el iPod, por culpa de iTunes Match no se me sincroniza con el iPhone. ¿Puede salir algo bien, por amor de Dios? 17.15h y el bus sale a las 17.30, salgo corriendo a la estación más por necesidad que por calentar. Llego sudando como un pollo, sin billete y a 2 minutos de que el bus salga. Estoy dentro, relax y a recomponer la lista del iPod.

Al llegar a Jaén me piya de camino san Roque mientras bajo a por mi querido compañero de fatigas. Entro unos segundos con to’ mi pinta deportista y le pido al Jefe que aporte las fuerzas que seguro que me van a faltar porque yo esto, y a 1 hora de salir, seguía sin verlo claro. No llueve pero hace más frio que pelando rábanos en otro sitio distinto del brasero. Javi sale y bajamos contentos e ilusionados al matadero, haciendo como que no sabemos lo que nos espera mientras los chaveas de la ciudad disputan su paralela maratón. Hasta aquí todo son risas y bromas, veremos a ver si no volvemos llorando jajajaja (esto ya es muy exagerao).

Al llegar a la Fuente nos encontramos con Chema Guillén que al pasar por un puesto de «incidencias» me anima a intentar conseguir un dorsal de última hora a modo reventa. Y LO CONSIGO! El magnífico 6639, acaba en el 9 de FERNANDO TORRES, de lujo que te crujo! Nos encontramos a Albreto y a Peibol vestidos para la ocasión de Spiderman y Superman respectivamente, estos tíos son los ídolos, sí señor!

Basta, son las 20h, el alcalde da el pistoletazo, ¡¡¡¡¡empieza la carrera!!!!!

Bajamos el Gran Eje, Javi y yo seguimos de coñitas. Paso subterráneo. Los corredores, motivaísimos, empiezan a gritar. Arriba está todo abarrotado de gente, vaya ambientazo, qué pasada! Maristas y subimos Av. de Madrid hasta ECI. Primera subida, se hace un pelín difícil con tanto agobio de corredores. Da igual, nosotros seguimos con las bromas. Cárcel antigua, Paseo de la Estación, suena Justin en el iPod, calle de Lacoste: la subimos, izquierda, autoescuela Amate hasta el convento, la gente anima, Javi y yo nos animamos mutuamente. Adarves hasta la rotonda de la palmera y fin de la primera parte de la excursión.

Todos dicen que la cuesta de Los Escuderos es lo peor con diferencia, y doy fe. Cosas de la providencia empieza a sonar «en este mundo raro», canción que me motiva a saco. Nacho por su parte se motiva cantando el himno del Atleti, qué grande es!! La idea era subir la cuesta andando, pero esa era la idea porque la realidad ha sido que como campeones la hemos subido, al igual que toda la carrera, corriendo. Llegamos arriba, las piernas dicen que basta, la cabeza dice que ni de coña y por suerte y por grandes motivos la cabeza gana y seguimos a tope con la Cope (en mi caso con Camela).

Catedral, Bernabé Soriano, la gente anima, anima, anima. Jardinillos hasta la Iglesia de Santiago, me doy cuenta que estoy riéndome solo, creo que la sonrisa no se me ha debido ir de la cara en toda la carrera, estoy pasándolo un poco mal pero a la vez disfrutando como un enano al lado de un buen amigo. Aplaudo al público, gracias a sus ánimos y a sus aplausos sacamos fuerzas de donde ya quedan pocas. Ver caras conocidas y oír tu nombre entre la muchedumbre te llena de fuerza en otros tramos, cuando incluso el flato aprieta. Antorchas, hogueras. Mirada a Javi, últimamente las bromitas han decaído un poco, «ya que estamos aquí la acabamos no?» Creo que me ha soltado uno de sus «qué tonto eres Llopis», y si no lo ha dicho seguro que lo ha pensado porque esa cara ya me la conozco ajajajajjaj. Risas y pa´lante.

Parece que ya queda poco. Parece. Al llegar casi a la Fuente nos desviamos a la derecha, cartel de los 8 km. Quedan 2, sólo 2! Llegamos al hospital. Saludo de Esther que creo que lo último que esperaba era verme allí. Calle de Moraleda. Nacho, Juanitín y Paco sueltan chorradas varias a nuestro paso, risas. Esquina de Ivarte, vamos vamos y vamos que sólo queda subir el Gran Eje. Se hace duro, muy muy duro, como que Duro tenga novia jajajaj, porque aunque el final se ve ahí las fuerzas están bastante out. Aumentamos el ritmo, en mi cabeza resuena una y otra vez el lema del MBA que Chema Camacho nos inculcó «Las batallas las ganan los soldados cansados». Fuente, últimos metros, Jav y yop nos miramos: LO HEMOS CONSEGUIDO coño, somos increíbles! Llegamos al control, SE ACABÓ!

SE ACABÓ. Yo, Jesús Llopis, que no ha corrido en su vida ha terminado la San Antón, esa carrera que siempre creyó reservada para Superhombres. Nos chocamos las manos mientras el corazón lucha por quedarse en el pecho y no salir despedido por la boca, pero eso ya da igual, HEMOS SUPERADO LA META, ha sido una carrera cojonuda, ya todo da igual.

Javi y Nacho (al que no he visto y me da rabia) han sido los culpables de que esto haya pasado, la leche. Un sentimiento de autosuperación que no se puede describir me invade, es como bajarse de la bici de spinning pero multiplicado por 10. Por la mañana le dije a mi madre que iba a correr y su mirada frigorífica me hizo leer en sus ojos algo así como «tú eres tonto hijo». A mi tío cuando le dije que por la tarde iría a Jaén me soltó un «no vas a llegar ni al final del Gran Eje». Es ilusionante ver como la gente te apoya y confía en ti. Bueno, esa gente, porque sin embargo Nacho, y sobre todo Javi, que ni son mi madre, ni mi tío, aunque si buenos amigos han hecho estos días todo lo contrario, quizá sin querer. Estas cosas van en las personas y ni los primeros por maldad ni los segundos para que diga esto de ellos actúan como la vida les deja.

Como recompensa nos dan un par de medallas y de camisetas antes de que Vich y yo pongamos la guinda con una buena Cruzcampo acompañada de sus rosetas reponedoras de fuerza, cual haba mágica en Goku. Normalmente me doy cuenta y me paro a pensar como Jaén es la leche y como estoy tan contento de tener a casi todos los amigos cerca. Hoy, además, esa alegría se multiplica por mil en una de las noches más grandes y felices que recuerdo. Mira que cuesta poco ser dichoso amigos!

Acabo aquí. Post largo, pero porque la hazaña lo merece.

Y, por cierto, sobra decirlo, pero este post está dedicado a @javisvillamor y a @nachowhitee: para así no olvidar todas estas anecdotillas (por lo de mi memoria pez) y para agradecerles por siempre el buen rato que hoy he pasado, sin olvidar tampoco al monitor de spinning en Emotion donde en las 5 ó 6 clases a las que he ido me ha convencido de que la fuerza está en la mente y si se quiere, SE PUEDE! 😀

————————

Lista de reproducción del iPod que siempre que escuche me recordará esos 10 km. y casi hora de alegres fatigas

Recorrido de la carrera en Googlemaps

Algunos datos para mejorar el año que viene:

  • Nacho: puesto 815, tiempo 46:36, media 12,36 km/h
  • Javi: puesto 2013, tiempo 54:05, media 10,65 km/h
  • Yop: puesto 2017, tiempo 54:06, media 10,65 km/h
  • Primero: Sebastian Martos, tiempo 29:48, media 19,33 km/h
  • Último: Jose Olea, puesto 3601, tiempo 1h:22, media 7,01 km/h

6 Comentarios

  1. Por petición, atrevida, de mi cliente y sin embargo amigo, Jesús Llopis, siempre primero amigo que cliente… Aquí dejo mi comentario…

    Eres un fenómeno, casi una especie en extinción!!! Jajajajaja. Lo mejor del post… El cocido de tu abuela!!! Seguro que fué a drede!!! Sentimentalmente… Te diré que admiro tu forma de vida, divertida sin olvidar el firme compromiso que todos tenemos con Dios. Sigue con ese ejemplo de felicidad!!! Haces mucho bien para todos aquellos que piensan que ir a Misa es de sosos y gente seria… Dejas claro con tu vivo testimonio que es todo lo contrario!!!

    Pd: el año que viene corro contigo, pero los escuderos andando ehhhhhh

    1. Casi me extingo el otro día, en eso si que llevas razón jajajajaja.

      Muchas gracias por tu comentario de amigo, de proveedor y de cliente jajajajaj, estas cosas son las que animan a seguir por el camino que desde hace tiempo empecé a recorrer. Uno siempre piensa que hace las cosas lo mejor que sabe, que puede, que le dejan, que quiere… pero cuando alguien de repente te da la palmadita en la espalda a la vez y sin quererlo te da otro pequeño empujón para seguir con más fuerza y ánimo.

      Gracias Juanjo, gracias Nacho, gracias Javi. To be continue… 😀

Deja un comentario